Si hay algo que puede limitar tu vida y las oportunidades que tengas en ellas, eres tú mismo a través de una palabra tan corta, pero significativa como lo es “NO”. Hoy quiero hablarte de lo importante que es dejar de decir no ante todo, para evitar ponerte límites. ¡Empecemos!

Cuando dices: NO

1. NO puedo: posiblemente lo peor que puedes decirte a ti mismo es que no puedes. Porque… ¿por qué no puedes? Si ante cualquier reto u obstáculo lo primero que piensas es que no puedes sacarlo adelante, lo cierto es que solo conseguirás lo que ahora mismo solo crees: no podrás hacerlo. El primer paso para encarar cualquier objetivo en la vida, es creer mentalmente que puedes alcanzarlo, porque entonces todas tus acciones se encaminarán a lograrlo. De igual forma, si lo primero que piensas es que no puedes, todas tus acciones te tratarán de mostrar que tienes razón, y no puedes hacerlo. Una de las cosas que te recomienda es que ante cualquier situación que requiera de tu voluntad, en lugar de pensar que no puedes desde el minuto uno, cambies la frase y digas “VOY A INTENTARLO”. Esta frase no es tan absoluta como “LO LOGRARÉ”, lo que te quitará presión a la vez que cambia tu mentalidad.
2. NO sé: este tipo de respuesta se nos presenta muchas veces en el ámbito laboral, ante los nuevos retos profesionales que se nos presentan y de los que dudamos, al determinar que no sabemos hacerlo. Esta es otra de esas frases que nos limita, porque estamos hablando en el presente, delimitando nuestro futuro. Puede que ahora no sepas, pero puedes hacer muchas cosas para saberlo en el futuro, ¿no? Asimismo, utilizamos el “no sé”, para dudar sobre nosotros y sobre lo que realmente queremos hacer. Igual que te decía en el punto anterior, debes cambiar ese no sé, por algo más positivo como “PUEDE SER” o “ES POSIBLE”, pequeños cambios en nuestra forma de pensar y hablar, para alcanzar grandes cambios en nuestra vida.
3. NO quiero: por último, otra de las frases con NO que debes borrar de tu vocabulario, es el NO QUIERO. Esta frase muchas veces muestra un deseo que es muy normal y que debemos respetar, pero en otras ocasiones la utilizamos para limitarnos. Por ejemplo, esta frase es una gran muestra de los miedos que podemos tener cuando decimos NO QUIERO que nada cambie. Pero… ¿por qué no quieres que cambie nada? Aunque ahora estés pasando un buen momento, eso no significa que en el futuro no sea así o que incluso tu vida siga mejorando. Decir que no quieres es limitar tu presente y futuro. NO LO HAGAS.

No puedo, no quiero, no sé… Son frases tan comunes en nuestro día a día que muchas veces no nos damos cuenta de lo que realmente implican. ¡Ten cuidado con como piensas, pues determinará como actúas!